Casi todos los turistas que viajan a Laos siguen el famoso “Banana Pancake Trail”. Vientiane, Viang Vieng y Luang Prabang son las ciudades más visitadas. El turismo está bien desarrollado allí. Hay hoteles de todas las categorías, aeropuertos internacionales y restaurantes gourmet.

Pero un consejo: en lugar de limitarse a seguir la ruta Banana Pancake, que va desde Luang Prabang en el norte hasta las 4.000 islas en el sur, deténgase en el camino para descubrir Laos fuera de los caminos habituales y su exuberante naturaleza.

La ciudad de Phonsavan es muy poco conocida por los visitantes. Sin embargo, es posible que algunos ya hayan oído hablar de la Llanura de las Jarras. En esta misteriosa llanura que se extiende cerca de la ciudad de Phonsavan, se encuentran esparcidas cientos de grandes tinajas de piedra. Descubre la historia del Llano de las tinajas y sumérgete en las leyendas vinculadas a este lugar único en el mundo. ¡Este lugar casi místico es perfecto para la fotografía y hará las delicias de los fotógrafos que huyen de las multitudes!

Cascada Tad Fane

Desde Vientián,en el camino hacia el sur, haz una parada en la localidad de Thakhek. En el antiguo distrito de negocios encontrará numerosos templos románticos y villas coloniales particularmente coloridas. La ciudad situada a orillas del Mekong limita con Tailandia. Por la noche podrás disfrutar de una increíble puesta de sol en el Mekong o en la frontera con Tailandia. El scooter es una de las mejores formas de explorar. Thakhek, sus paisajes montañosos e increíbles cuevas kársticas.

Entre Thakhek y las 4000 islas, se recomienda encarecidamente una breve escapada a Pakse. La tercera ciudad más grande del país está situada en la meseta de Bolaven y alberga las cascadas más hermosas de Laos. Pakse está rodeada de naturaleza prácticamente intacta y de grandes plantaciones de té y café. A través de una corta caminata en la selva tropical, podrás descubrir las cascadas de Tad Fane, Tad Lo, Tad Suong y Tad Hang. Al pie de las cascadas se han formado piscinas naturales y refrescantes. ¿Qué podría ser mejor que un pequeño baño en el corazón de la naturaleza de Laos para completar su viaje?